luns, 20 de novembro de 2017

mujeres silenciadas por la historia

Erase un vez un mujer llamada Catalina II que fué nombrada reina de ´Rusia el 9 de junio de 1762, por méritos propios la empezaron a llamar Catalina la grande. Catalina recogió el legado de Pedro el grande. Pedro importó la tecnología, instituciones de gobierno... y Catalina taja medicina, arte y cultura. La vida de catalina pasó de ser una princesa alemana a una gran duquesa Rusa.  

A lo largo de su reinado, la duquesa tuvo varios pretendientes, uno de ellos era un joven que recogía a la vez belleza física y facultades mentales. Ella siempre mostró gratitud a sus pretendientes, que eran elevados a altos cargos todo el tiempo que fueran favoritos e incluso después del final de un romance les concedía grandes riquezas. Su ùltimo pretendiente era el mas caprichoso y extravagante. 


Catalina era demasiado dura con su hijo Pablo. La duquesa decía que el verdadero padre de Pablo, era su primer amante Serguéi, pero este se parecía físicamente a su esposo. Una vez viuda salió del castillo para dar la luz a su hijo ilegitimo, Pablo fue nombrado conde. Catalina tenìa la intención de la sucesión a Pablo, y dejar a su nieto mayor la corona. Eso se debe a la desconfianza que le producía  su conducta. 

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